domingo, 27 de febrero de 2022

REDISTRIBUIR LA RIQUEZA

 Comentario 28/01/2022

 

REDISTRIBUIR LA RIQUEZA

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

Gustavo Petro, Arelis Uriana, Francia Márquez, Camilo Romero y Alfredo Saade hablaron con Diana Calderón en el programa hora 20 de Caracol radio sobre sus propuestas y planes de gobierno el jueves 17 de febrero. Se ofrecieron diversas opiniones por cada uno de esos precandidatos a la presidencia de la república, sobre los más diversos temas. Sin embargo, queremos centrar la atención en el concepto afirmado por todos los participantes de reducir la pobreza monetaria mediante redistribuir la riqueza, dado que Colombia presenta niveles de población vulnerable, con ingresos inferiores a $331.668 pesos mensuales por persona, cercanos al 35 % de la población, es decir, aproximadamente 17 millones de personas, cifra de la mayor preocupación para todos los ciudadanos.

Pues bien, en concepto de los precandidatos del Pacto Histórico o la autonombrada Colombia Humana, ya mencionados, lo que se debe hacer es redistribuir la riqueza mediante un supuesto concepto de equidad social, donde los que tienen más, en su opinión, los empresarios y las personas de altos recursos, tienen la obligación de pagar más y más impuestos y contribuciones de todo tipo, para que el Estado todopoderoso subsidie a los que no han logrado superar los niveles de pobreza. Este es el principio redistributivo de los países socialistas totalitarios y comunistas de un sólo partido, con camarilla de gobernantes única y eterna, que ya sabemos a qué conduce, fundamentados en:

“De cada cual, según sus capacidades, a cada cual según sus necesidades”.

Con este principio se acabarán las iniciativas de los que tengan capacidades (personas y empresas), porque entenderán que su función es producir para satisfacer las necesidades de los demás que tengan carencias de cualquier tipo insatisfechas, y eso no es así, ni puede ser así. Por ese pensamiento, las inversiones, los profesionales y los capitales se van de las economías socialistas y comunistas. No más ver lo que ha pasado en Venezuela en los últimos 20 años, o en Perú y Chile recientemente, el éxodo de capitales es miedoso.

Si cada persona, deja de pensar en construir su progreso y bienestar a partir de su propio esfuerzo, porque alguien más los va a sostener, se postrarán las economías y no habrá progreso para nadie. Me vienen a la mente, por un lado, la experiencia de USA al dar subsidios equivalentes al salario mínimo a los pobres en pandemia, que ha traído como resultado que esos ciudadanos no quieran trabajar sino vivir del Estado. Por otro lado, una asambleísta chilena quien afirmaba que todo lo van a estatizar, que horror, se acabó la iniciativa privada, la libertad de empresa, la libre inversión, el derecho a la propiedad privada y a ser, tener o progresar más que otros, con base en el esfuerzo propio, seremos todos lo mismo, por cuenta de lo que decida la camarilla del Estado que gobierne al respectivo país.

En opinión de los precandidatos de la Colombia Humana, el Estado está obligado a satisfacer las necesidades de los ciudadanos y de las regiones en todo concepto y por toda la vida, en aspectos tales como: salud, educación, pensiones, infraestructura, recreación y bienestar, auxilio en las catástrofes, servicios del propio Estado, seguridad, rentas mínimas, rentas vitalicias, etc., etc. Este es el estado benefactor que sueñan los políticos de la izquierda radical, los socialistas y los comunistas.

Como afirmaba Margaret Tatcher: “El estado no tiene más recursos que lo que los ciudadanos paguen”. La equidad o la solidaridad no es redistribuir la riqueza, es crear oportunidades para que todos puedan beneficiarse a partir de su propia iniciativa, competencia y capacidad. Sin embargo, es cierto que el Estado debe proteger a poblaciones vulnerables, pero esto no significa hacerse cargo de su vida de un todo y por todo y para toda la vida.

La manera de generar oportunidades es con el crecimiento y el desarrollo económico, como afirmaba Pablo VI: “el desarrollo es el nuevo nombre de la paz”. El crecimiento y el desarrollo económico tienen la pretensión de generar opciones de mejor calidad de vida y de mayores oportunidades de vida para más personas, como de hecho puede verificarse en el mejor estándar de vida de las sociedades capitalistas en los últimos 50 años, por ejemplo, donde la esperanza de vida, la calidad de vida y los PIB per cápita han mejorado sustancialmente, tanto como la salud, la educación, la medicina, la infraestructura, la cultura, el deporte, etc. ¿Por qué será que los que históricamente han buscado salir de los regímenes comunistas y los inmigrantes actuales de muchos países del mundo quieren llegar a USA o Europa, países con libertad de empresa y de iniciativa privada, o, para citar un ejemplo absolutamente triste, los pobres venezolanos, al menos, llegar a Colombia para tener algunos beneficios?

Si, como consecuencia del desarrollo económico capitalista, algunos empresarios se vuelven tremendamente exitosos y se enriquecen, esto no habla mal del sistema, lo refuerza en las posibilidades que crea, y, por supuesto, no significa que el derecho a la libertad de empresa esté por encima de los derechos de los pueblos, ni de la dignidad de los pobres, ni tampoco del abuso del medio ambiente. Esos empresarios no reinvierten sus utilidades en la luna o en Saturno, lo hacen en el mundo real y presente, multiplicando el desarrollo en nuevas empresas, iniciativas, invenciones o alternativas, con lo cual generan más oportunidades para todos, no sólo para ellos. Muchos, además, tienen grandes sumas dedicadas a la responsabilidad social empresarial, aunque hay otros que no lo hagan, como podría suceder en cualquier parte del mundo.

La superación de la pobreza mediante mejores condiciones de vida es, por supuesto, una función del Estado, no del sector privado, este último creará tantos empleos como necesite en su negocio, pero no empleos por subsidio. El sector privado y los grandes empresarios pagarán los impuestos equitativos y progresivos, no expropiatorios, para que el Estado pueda cumplir con su deber, eso sí, con eficiencia y eficacia y evitando la politiquería y la corrupción. La visión de las personas y las empresas es crear oportunidades para ellas y para que más personas las puedan aprovechar también, pero no es su deber sacar a los pobres de la pobreza. No nos olvidemos, además, que en las sociedades de economías totalitarias también hay ricos y suelen formar parte de las esferas del Estado, esos ricos no tienen por función, tampoco, subsidiar de por vida a los pobres.

domingo, 20 de febrero de 2022

EL REBOTE

Comentario 22/02/2022

 

EL REBOTE

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

Se comunica al país que el crecimiento económico (PIB) del año 2021 alcanzó la notable cifra de dos dígitos, el 10.6%, considerado el más alto del país en toda su historia. Motivo para el regocijo de todos los colombianos, ya que la dinámica de la economía se irriga por toda la geografía, beneficiando a unos y otros, no por igual, obviamente ya que hay sectores económicos de mejor desenvolvimiento, como fueron, en este caso, los de: manufactura, comercio, electricidad, transporte, alojamiento, comidas, actividades artísticas, administración pública, salud, educación y recreación, especialmente.

Hay sectores, como es obvio, de menor crecimiento, como en el caso de minas y canteras, construcción, información y comunicaciones, actividades financieras e inmobiliarias, por ejemplo. Sin embargo, lo destacable es que todos los sectores de la economía están creciendo, con lo cual, los beneficios de ese crecimiento están por todas partes, en todo el país y en todo tipo de personas. No cabe duda de que después de atravesar las restricciones de la pandemia, los paros, así como los hechos externos en la logística mundial, es refrescante esta noticia y llena de motivos el avizorar el futuro con optimismo.

A pesar de tan sonoro resultado, no han faltado “las aves de mal agüero”, que le declaran al país que no hay razones para el optimismo y que todo se debe al efecto rebote. Examinemos brevemente el fenómeno, con unos simples números:

 

ESTADÍSTICAS MACROECONÓMICAS DE COLOMBIA AÑOS RECIENTES

Año

Crecimiento PIB (%)

Inflación IPC (%)

2019

3.2%

3.80%

2020

-7.0%

1.61%

2021

10.6%

5.62%

 

Fuente: Banco de la República de Colombia.

 

Hagamos una simplificación matemática y supongamos que la economía del país tenía $100 unidades monetarias en su producción interior bruta (PIB) al cierre de 2019 y que por efecto del decrecimiento del PIB y de la inflación en 2020, este valor se redujo a $ 91.39 (100 – 7.0% - 1.61%) durante ese año. Si al término del 2021, el crecimiento de la economía fue de 10.6% y la inflación fue del 5.62%, las unidades monetarias para el cierre del 2021 serían de $95.9 ($91.39 + 10.6% - 5.62%), es decir, que la producción interior bruta aún no se habría recuperado al nivel de las $100 unidades monetarias iniciales, que existían al cierre del 2019.

En consecuencia, el buen crecimiento del 10.6% en términos monetarios, es decir, del valor del dinero, ha sido parcialmente anulado por la inflación tan fuerte que se presentó en el 2021. Por consiguiente, simple y llanamente, no basta crecer bien en la economía, hay que hacerlo generando menor inflación.

Quién en realidad rebotó fue la alta inflación que venía descendiendo desde 3.8% para 2019 a 1.61% para 2020, ¿cómo explicar este deterioro en el valor de la moneda al verse erosionada por la inflación?, existen tres razones fundamentales:

  • La parálisis de la actividad económica debido al covid-19 y a los paros con vandalismo, frenaron la producción y/o la comercialización de insumos, productos, bienes y servicios. Ya se está reactivando la actividad productiva como lo demuestra el crecimiento del 10.6% del PIB para 2021. Poco a poco los ritmos de producción y consumo se normalizarán y los problemas de escasez, abastecimiento y los de demanda y oferta se suavizarán, con un impacto en una menor inflación.
  • Los bienes importados (alimentos, materias primas, bienes intermedios, herramientas, equipos y maquinaria, etc.) también normalizarán su oferta que se ha visto alterada por problemas logísticos a nivel mundial y por el encarecimiento de los precios en todos los países, por las mismas razones que en Colombia. Baste como referencia citar la inflación en los Estados Unidos, que se está presentando guarismos del 7% y 7,5% nunca vistos.
  • El precio de los bienes y servicios importados están sometidos a las fluctuaciones de las monedas de cada país, en nuestro caso en la relación peso/dólar americano, cuya devaluación fue del 16%, al pasar el valor de la divisa americana de $3.432 pesos por dólar en diciembre 31 de 2019 a $ 3.981 al cierre de diciembre del 2021. Este impacto tan fuerte, en parte explica también el porqué del rebote de la inflación en el 2021.

Con relación a otros países desarrollados que pertenecen a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) nuestro crecimiento es notable, y comparable al de países latinoamericanos cuyos crecimientos fueron también de dos dígitos en el año 2021, como en Perú o en Chile, por ejemplo.

No podemos cantar victoria todavía en cuento la recuperación total de la economía del país, aunque vamos por buen camino, hay que lograr una suavización de la inflación y continuar por la senda del crecimiento positivo en todos los sectores de la economía, para seguir generando progreso, desarrollo, bienestar y mejores oportunidades laborales y productivas a todos los ciudadanos en lo ancho y largo de la geografía del país.

Las previsiones de crecimiento económico para el 2022 se asoman a la no despreciable cifra del 4.5% o 5%, lo cual no será un rebote, por supuesto, pero si tenemos una inflación cercana al 5%, ya previsible por la conducta de los precios de todo tipo de bienes y servicios, el beneficio de ese crecimiento no se traducirá en mayor bienestar para todos. ¿Será que se puede controlar mejor la inflación, especialmente de alimentos?


martes, 15 de febrero de 2022

LA LEGÍTIMA DEFENSA

 Comentario 15/02/2022

 

LA LEGÍTIMA DEFENSA

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

Durante la campaña electoral se han agudizado las críticas sobre el gobierno de Iván Duque, que terminará con la posesión el 7 de agosto del presente año, de quien sea elegido en las urnas durante los próximos comicios del 29 del mes de mayo. Expresiones de rechazo y descalificación tales como las siguientes, para sólo citar unas pocas:

  • Acabó con la economía del país.
  • Descarriló las finanzas públicas.
  • Elevó la pobreza.
  • Destruyó los acuerdos de paz.
  • Le quedó grande la seguridad.
  • Con las oligarquías Bogotanas capitalistas se entregó al imperio de USA.
  • Es guerrerista para las relaciones internacionales.
  • Lo desbordó la pandemia.
  • Sólo favorece a los ricos en materia tributaria.
  • Es el peor gobierno de toda la historia.
  • Etc.,etc.,etc.

Nada más lejos de la verdad, en su legítima defensa diremos que el presidente Duque pasará a la historia primero como un verdadero demócrata, que gobernó con una amplia gama de matices, no sólo de su partido, respetó e impulsó los acuerdos de paz y combatió con firmeza la guerrilla y, hasta donde las Cortes le permitieron, combatió el narcotráfico. Además, su figura de estadista es reconocida internacionalmente por los organismos multilaterales y los gobiernos democráticos.

En segundo lugar, enfrentó con gran éxito la peor pandemia de la historia contemporánea del mundo, el covid 19, que afectó severamente la estabilidad en la salubridad, la economía y los problemas sociales de todos los países.

En tercer lugar, destaquemos algunas de sus ejecutorías económicas y sociales:

  • Sacó al país de la mayor recesión que ha tenido en su historia, como consecuencia del covid y de los paros.
  • Ya recuperó 4.5 millones de empleos que se perdieron durante ese período.
  • El PIB del 2021, 10.2%, ha sido el más alto de la historia contemporánea y no es solamente rebote porque todos los sectores de la economía están creciendo.
  • El programa de vivienda social y de vivienda no VIS han sido notables, con más de 230.000 soluciones para ese año.
  • Los sectores de construcción pública y privada van muy bien y las vías 4G no se han detenido.
  • El comercio recuperó su actividad y la industria se reactivó.
  • Volcó el presupuesto público a la ayuda solidaria: adultos mayores, mujeres cabeza de familia, nóminas, educación e ingreso solidario.
  • La economía del país ya empieza a sanearse y el endeudamiento público ya bajó del 65% al 62%, el déficit fiscal del 8.9% al 7.6%.
  • A pesar de la pérdida de la calificación de grado de inversión por las calificadoras de riesgo, mantiene la línea de crédito stand by del fondo monetario internacional y pudo financiar gasto social con los derechos especiales de giro del mismo fondo.
  • La balanza de pagos poco a poco se recupera.
  • Ha evitado la devaluación masiva por la parálisis en los flujos de capital debido a la pandemia.
  • El desempleo bordeó el 25% en pandemia, ya está debajo del 13%, en Colombia es estructuralmente alto porque hay elevados niveles en los índices de informalidad o de inactividad, cerca del 60%.
  • Acaba de celebrar un acuerdo con Singapur lo que le abrirá aún más las puertas de los mercados asiáticos.
  • Superó con éxito los paros armados de Fecode y la primera línea, que han causado grandes pérdidas a la economía y generado desabastecimiento en muchas zonas y que pretendían tumbarlo como gobernante.
  • Para no alargar, etc., etc.

En cuarto lugar, con el excelente y notable consejero, Emilio Archila, ha avanzado con paso firme en la implementación de los acuerdos de paz, hasta donde la pandemia y las finanzas públicas lo han permitido. Inclusive, en contra de los integrantes más radicales de su partido político a los cuales les ha dicho que él, como presidente, es gobernante de todos los ciudadanos y debe cumplir los compromisos del Estado.

Ha respetado y financiado las instituciones de la paz, como son la JEP, la Comisión de la Verdad, las curules de los guerrilleros fruto del acuerdo de paz, avanza decididamente para establecer las curules para las víctimas; en materia de tierras con grandes progresos, recuperando zonas de guerrilla en favor de los campesinos y sus cultivos en varias regiones del país. Sin embargo, ha mantenido una política de seguridad frente a la guerrilla y la delincuencia común donde han caído los grandes cabecillas de esas bandas aupadas por Venezuela. No ha desmayado en el combate a las disidencias de las FARC, al ELN, y a los grupos de delincuencia organizada y narcotraficantes. Por supuesto para la izquierda radical, nada de esto es significativo y siempre afirmarán que incumplió por completo los acuerdos de paz.

En este momento hay lunares como la alta inflación, pero es consecuencia de insuficiencia en la producción y comercialización de alimentos debido a la pandemia y a la crisis de contenedores a nivel mundial. Sin embargo, y sin lugar a duda, el presidente Duque se ha ganado un lugar en la historia como notable entre los estadistas del país

lunes, 7 de febrero de 2022

VOTO DIVIDIDO = VOTO PERDIDO

 Comentario 07/02/2022

 

VOTO DIVIDIDO = VOTO PERDIDO

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

El escenario que nos acompañará en el proceso electoral presidencial del presente año es bastante preocupante, dada la forma como los acontecimientos se vienen desarrollando: divisiones, personalismos, figuraciones individuales, aspiraciones de desconocidos políticos, transfuguismo, acusaciones, zancadillas, falta de identidad política, partidos tradicionales desdibujados, avales de última hora, y un sin número de candidatos de todos los colores, alrededor de unos 20. Algunos de ellos se decantarán en las consultas del mes de marzo, pero al final, para la elección presidencial, van a participar demasiados, probablemente cinco o seis o, de pronto, más. Vamos a ver cuántos se "bajan o se suben al bus de las presidenciales”.

Aparentemente es bueno que participen varios candidatos, es decir, y como dirían las abuelas, “que haya bastante de dónde escoger”, sin embargo, en un país fuertemente polarizado y cargado de ánimos, es un motivo de preocupación, por la atomización de los votos en corrientes de opinión, muchas de las cuales, al parecer y hasta ahora, no se diferencian en sus contenidos ideológicos, sólo en la posición en el horizonte de derechas, centros o izquierdas en que se auto clasifican. La razón es que no han hecho una presentación formal, sustentada y argumentada de sus programas, sólo de su grupo político, como lo más conveniente para el país. Veamos:

En política existen tradicionalmente dos grandes visiones sobre cómo desarrollar nuestros países, hacer crecer nuestras economías y afrontar los problemas sociales que nos aquejan. Una visión, la cual siempre se la ha llamado de derecha, propende por el capitalismo democrático (originada en el liberalismo económico) como enfoque político, económico y social, visión según la cual, es el sector privado el llamado a tener el liderazgo económico y mantener la iniciativa particular como el pilar del desarrollo de los mercados, con el apoyo del Estado en lo que es de interés nacional- como la salud, la educación, la vivienda, entre otros- en las relaciones exteriores o en el acompañamiento y servicio social a las poblaciones vulnerables. Por supuesto, ante todo se refiere a un Estado democrático, con elecciones populares libres, separación de poderes (ejecutivo, legislativo y judicial) y sujeción a la constitución, a las leyes y a los tratados que nos obliguen internacionalmente. Lamentablemente, en algunos casos, estos modelos de gobierno se han vuelto totalitarios o dictatoriales.

En el otro extremo, siempre se ha hablado de las corrientes de la izquierda, como aquellas que propenden por mayor o total intervención del Estado en la conducción de los asuntos de la nación para superar los problemas de equidad en las oportunidades y las circunstancias de la pobreza, relegando el papel del sector privado al direccionamiento que el Estado establezca. Este modelo es conocido como el del socialismo, que en algunos casos se desarrolla en escenarios democráticos, bajo la figura de la socialdemocracia, pero, en otros casos, se convierten en gobiernos autocráticos, con limitación a las libertades individuales, fuerte intervencionismo estatal en la economía, partidos únicos y hegemonía en el poder, bajo el llamado socialismo de estado. ¿Y dónde queda el centro?

En la práctica, es difícil saberlo, puesto que no existe una definición única y cada uno que lo describe parece tener una aproximación diferente, lo que algunos llaman matices. En principio podríamos decir que no es el capitalismo democrático puro o el socialismo de estado puro, es como una mezcla de ambos, lo cual lo hace difícil de entender. De hecho, algunos autores dicen que “el centro no existe” y quien trata de ir por el centro, no logra ni lo mejor de un modelo ni lo mejor del otro y posiblemente se queda en el peor de los mundos. Se dice entonces, que el centro propende por “tanto Estado como se requiera, pero tanta libertad de mercado como sea posible”. Equilibrio difícil de lograr, pues, generalmente, se es lo uno o lo otro, pero no los dos a la vez, la casuística del caso a caso para gobernar es un horror, a veces si y a veces no, ¿entonces?

Es claro que, para las elecciones presidenciales del 2022 - también para las de Senado y Cámara- se avizoran tres grandes corrientes de opinión. Por una parte, los partidos con orientación de defensa de la libertad y la iniciativa privadas, genéricamente denominados como la derecha, donde están los ex alcaldes Char, Peñalosa y Gutiérrez, por un lado, o la centro derecha, para algunos, o centro izquierda, para otros, con el heterogéneo grupo que acompaña a Fajardo, Galán, Jorge Robledo y a Alejandro Gaviria, como los más representativos; finalmente, los llamados independientes como Oscar Iván Zuluaga, por el centro democrático, Rodolfo Hernández e Ingrid Betancourt, quien se separó del movimiento de Fajardo recientemente porque lo calificó como clientelista. En el otro extremo, la izquierda, se aglutinan alrededor de la Colombia Humana de Petro personajes de la antigua Unión Patriótica, el Polo Democrático y el partido Comunista, con los dos recientes adeptos que llegan allí después de estar en todo tipo de partidos, Roy Barreras y Armando Benedetti, en este caso, también para citar sólo los más reconocidos.

Petro tiene su caudal de votos, estimado en el 27% de los votantes, que le son fieles, según las últimas encuestas, los demás, siendo los más notorios de ellos, Hernández, Char, Zuluaga y Fajardo, con porcentajes entre 4% y 12% y los restantes, con porcentajes muy bajos. Aparece también un 27% de indecisos o que no votarán, según la encuesta de Yanhaas publicada en EL Colombiano el 7/2/2022.

Las consultas de marzo disminuirán el número de candidatos, pero los que quedarán son demasiados, frente a la consistencia de la Colombia Humana. No hay que decir más, el resto de los votos se dividirá en porcentajes tan bajos que será difícil destronar a Petro, quien pasará a la segunda vuelta muy fortalecido. Voto de derecha o centro tan dividido, será voto perdido.

¿Que sigue después?, nadie lo sabe, pero si los candidatos de la derecha y del centro derecha, no se aglutinan para la segunda vuelta, el país quedará en manos de la izquierda y será otra nación latinoamericana con este enfoque de gobierno, aún con la pésima experiencia de gobiernos semejantes en México, Nicaragua, Venezuela, Argentina y Perú.

ECONOMÍA RESILIENTE Y MAL GOBIERNO

  Comentario 07/07/2025   ECONOMÍA RESILIENTE Y MAL GOBIERNO   Por: Carlos Alberto Mejía C. Ingeniero Industrial y Administrativo. ...