domingo, 29 de agosto de 2021

LOS CANDIDATOS PRESIDENCIALES

 Comentario 30/08/20201

 

LOS CANDIDATOS PRESIDENCIALES

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

En interesantes foros o entrevistas realizados en diferentes medios de comunicación del país, se han ido conociendo los programas de gobierno de los distintos candidatos que hasta ahora han manifestado en firme su interés por postularse para la presidencia de la República (aunque se barajan otros más).

Hemos hecho una clasificación de los principales nombres, según la tendencia política manifestada[1] hasta ahora, así:

  • En la derecha parecen estar los candidatos: Paloma Valencia, Miguel Ceballos, Federico Gutiérrez, Óscar Iván Zuluaga, Enrique Peñaloza, Juan Carlos Echeverri, Mauricio Cárdenas, María Fernanda Cabal, Rafael Nieto y Eduardo Verano.
  • En el centro parecen estar los candidatos: Juan Manuel Galán, Jorge Robledo, Dilian Francisco Toro, Alejandro Gaviria y Sergio Fajardo.
  • En la izquierda sólo aparecen: Roy Barreras y Gustavo Petro.

Leyendo entre líneas, más o menos se han referido a los siguientes temas unos u otros, según su posición política:

Los de la derecha: su enfoque defiende el estado de derecho, la democracia activa, la propiedad, el mercado y la iniciativa privada y sus ideas giran alrededor de los siguientes conceptos:

  • Fortalecer el empleo más que ampliar la política de subsidios del Estado.
  • Combate a la pobreza y a la informalidad.
  • Descentralización administrativa y presupuestal.
  • Duro con la corrupción y la impunidad.
  • Desarrollo industrial y agrícola y menos carbón y petróleo.
  • Reformas: a la justicia, laboral (menores costos laborales), tributaria (menores impuestos y simplificación tributaria), política y pensional.
  • Fomento a la inversión y a la empresa privada, menos Estado y más privado.
  • Saneamiento del sector salud.
  • Gobierno austero.
  • Desarrollo al sector de servicios.
  • Protección al medio ambiente y combate al calentamiento global.
  • Seguridad ciudadana.
  • Transporte público sostenible.
  • Fomento al empresarismo.
  • Mayor formación de técnicos y tecnólogos.
  • Mayor estabilidad en normas y políticas.

Los del centro: su enfoque defiende el estado democrático, sin otras precisiones y sus ideas principales son:

  • Más subsidios por parte del Estado.
  • Inversión en infraestructura.
  • Más empleo.
  • Más educación.
  • Soluciones para la informalidad.
  • Descentralización administrativa.
  • Representación política amplia.
  • Fomento a la industria y al agro.
  • No suscribir más Tratados de Libre Comercio (TLC).
  • Combate al contrabando.
  • Fomento a las exportaciones y sustitución de importaciones.
  • Reformas laboral y pensional.
  • Desarrollo de Clúster empresariales.
  • Más fuerza pública.

Los de la izquierda: su pensamiento nos habla de un Estado fuerte y redistributivo, pero democrático, y sus principales planteamientos son:

  • Proteccionismo y nacionalismo.
  • Reforma agraria.
  • Fomento a la industrialización.
  • Revisión de los TLC.
  • Impulso a las exportaciones no mineras.
  • Exportación de conocimientos.
  • No carbón y no petróleo.
  • Empleo de emergencia por cuenta del Estado.

A la altura del proceso electoral, en eso van las posiciones, con claras diferencias, si bien algunas coincidencias, más del centro y la derecha que con la izquierda. Falta mucho terreno para llegar a la elección presidencial y lo más importante, por lo pronto, es la unificación de las candidaturas en las diferentes corrientes, lo cual esperamos que sea el proceso de los próximos meses.

Mientras tanto, es imperativo reconocer la abundancia decreciente de candidatos desde la derecha hasta llegar a la izquierda. Y que, por lo pronto, los ciudadanos haríamos bien en empezar a pensar qué es lo que le conviene al país y qué tipo de liderazgo requiere en los próximos años.

Nota: las ideas de este comentario se han extraído de publicaciones realizadas por El Colombiano el sábado 14 de agosto, por La República el martes 17 de agosto de 2021 y algunas publicaciones de El Tiempo de diferentes fechas recientes.



[1] La clasificación se hace por tendencias políticas más que por partidos, dado que muchos de ellos no han manifestado su afiliación a un partido político y prefieren emplear el mecanismo de firmas para avalar su candidatura.

lunes, 23 de agosto de 2021

EL NEOPAPISMO

 Comentario 23/08/2021

EL NEOPAPISMO

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

Desde que Cristo pronunció las palabras “tú eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia”, refiriéndose al apóstol Pedro, a quien encomendó también las “llaves del cielo” y además la misión de “apacentar[1] sus corderos y sus ovejas”, se instituyó la figura del papado o “gobernante” de los fieles cristianos y, más precisamente, de los católicos. El papa es el obispo de Roma y, como tal, recibe la consideración de ser la cabeza visible de la Iglesia Católica y del Colegio Episcopal, además del título de soberano en el Estado de la Ciudad del Vaticano.

La misión de los papas es la de acrecentar el reino de Dios, mediante la evangelización de los fieles, a partir del acto del bautismo propio de la religión católica, con la cual se establece la sumisión a las leyes de Dios y a los designios del papa, quien tiene la potestad de declarar dogmas religiosos. Esta última es su facultad más controversial, ya que implica la llamada infalibilidad papal, por la cual, conforme al dogma católico, el pontífice está exento de cometer errores en materias de fe, religión y moral, ya que se considera que habla ex cathedra, es decir, que no se equivoca cuando se expresa sobre los temas de la ley de Dios.

Pues bien, tan importante figura y misión, a través de los siglos se desfiguró para tener en algunos de los Papas de Roma verdaderos Reyes, con poder político y militar, afán de posesiones y dominios, territorios propios, grandes riquezas, influencias en muchos otros reinos, imponentes ejércitos conquistadores, propios o constituidos con mercenarios a su servicio, con lo cual su papel se transformó en ser más de la “tierra que del cielo”, para su propio gozo y beneficio. Hay historias de algunos Papas que verdaderamente horrorizan y escandalizan por sus matanzas, afán de riquezas y conquistas, poder e influencias políticas, vidas sexuales desenfrenadas, y por toda la maldad que pueda imaginarse.

En ocasiones, se transformó la dignidad del papa, como jefe religioso, a ser un aguerrido jefe político, pero se usó la religión como excusa para los más terribles actos de persecución, como fue la época de los tribunales de la Inquisición, frente a los cuales muchos hombres murieron por orden de la Santa Madre Iglesia, prácticamente todo el que pensara u obrara diferente a los dogmas de la Iglesia era perseguido y torturado, y posteriormente asesinado, en el nombre de Dios. Esto retrasó el avance científico y la difusión del conocimiento, se convirtió en la época del oscurantismo y terminó por alejar a muchos pueblos de la fe católica, acogiendo otras creencias y pensamientos.

La Iglesia de Roma fue, entonces, rica y poderosa, aún sigue siendo ambas cosas, aunque predique lo contrario: la fe, el amor al prójimo, la humildad, la moral y las bienaventuranzas. No quiero decir con esto que no haga un significativo aporte a la difusión de la fe católica y al servicio de las comunidades, simplemente que no todo en la Iglesia ha dejado de ser como era. Hay sacerdotes y religiosos o religiosas que son verdaderos Santos, dignos de ser acompañados en vida y venerados luego de su muerte. Pero hay otros que, si bien predican los principios religiosos, poco hacen para practicarlos.

Los papas de Roma en los últimos años han vuelto al redil del evangelio de Cristo y han dejado su papel de guerreros y conquistadores de las cosas mundanas, para ser, de nuevo, evangelizadores de la fe cristiana en la mayoría de los casos. Prácticamente los papas del siglo XIX y del siglo XX tienen unas vidas meritorias y ejemplares, me refiero a Pio XI y XII, Juan XXIII, Pablo VI, Juan Pablo I y II y Benedicto XVI.

El actual papa Francisco con una mezcla de jefe religioso e influenciador político muy de corte socialista (progresista) como veremos a continuación. No discutiremos sus enseñanzas religiosas, en las cuales, como se ha dicho, se considera infalible. Pero sí su activismo político, veamos el caso a partir de algunas de sus reflexiones, por citar sólo algunas, una de ellas en la última encíclica que se titula ‘Fratelli tutti’ (Hermanos todos), el pontífice arremetió contra el capitalismo y el dogma neoliberal de la actualidad, van algunas de sus afirmaciones (Portafolio 6/10/2020):

  • “El desarrollo no debe orientarse a la acumulación creciente de unos pocos (...) el derecho de algunos a la libertad de empresa no puede estar por encima de los derechos de los pueblos, ni de la dignidad de los pobres, ni tampoco del respeto al medio ambiente”. Y junto con esto, habló del rol del empresario, al apuntar que “tendrían que orientarse al desarrollo de las demás personas y a la superación de la miseria, especialmente a través de la creación de fuentes de trabajo diversificadas”.

Por otro lado, en recientes declaraciones a raíz de las efemérides del texto bíblico de la multiplicación de los panes y de los peces, comentó: (El Tiempo 01 de agosto 2021)

  • “El verdadero milagro no es la multiplicación, que produce vanidad y poder, sino el compartir, que aumenta el amor. Nosotros tratamos de acumular y aumentar lo que tenemos; Jesús, en cambio, pide dar, disminuir. Nos encanta añadir, nos gustan las adiciones; a Jesús le gustan las sustracciones, quitar algo para dárselo a los demás”.

Podemos estar de acuerdo o no con las afirmaciones anteriores del Papa Francisco, ese no es el punto de discusión de este comentario, el problema es el tinte político de sus aseveraciones, de claro contenido socialista, redistributivo, colectivista e igualitario, las cuales pueden ocasionar reacciones políticas más que religiosas y con ello, de nuevo, la Iglesia de Roma vuelve a buscar una influencia política en el mundo, pero, sabemos por las experiencias pasadas de muchos papas, que Religión + Política es una difícil y explosiva mezcla.

Esto es el NEOPAPISMO, con los peligros que conlleva el alejamiento de la Iglesia de su orientación espiritual, de la promoción de la fe y del apoyo a las creencias de sus fieles, versus a sus opositores o contradictores políticos. Creo que no es bueno que la Iglesia trate de asumir un papel de líder político a nivel mundial, de nuevo se vuelve más de la “tierra que el cielo” y puede perder muchas “batallas” y fieles.



[1] Apacentar en términos bíblicos significa gobernar.

sábado, 14 de agosto de 2021

EL POPULISMO DE IZQUIERDA O DE DERECHA

 Comentario 16/08/2021

 

EL POPULISMO DE IZQUIERDA O DE DERECHA

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

El populismo puede presentarse en líderes de izquierda o de derecha, y en ambos casos es igualmente malsano y produce consecuencias muy negativas, especialmente en el largo plazo. El populismo está caracterizado por promesas vacías, es decir, llenas de sonoridad, pero de poca realidad, por ser impracticables, ilegales, no financiables o inviables en sí mismas. Además de un concepto político, el populismo suele rechazar los partidos políticos tradicionales ya sea en la práctica efectiva o en los discursos, también muy combativos frente a el statu quo o a las clases sociales, grupos políticos, de opinión o movimientos de interés ciudadano que estiman contrarios a sus ideales.

El populismo, generalmente, apela al pueblo para construir su poder, entendiendo al pueblo como las clases sociales bajas y sin privilegios económicos o políticos. Suele basar su estructura en la denuncia constante de los males que, supuestamente, encarnan las clases privilegiadas o los opositores. Los líderes populistas, por lo tanto, se presentan como redentores de los humildes, frecuentemente sembrando odio de clases o rivalidades entre grupos de ciudadanos o regiones, que pueden volverse, con el tiempo, radicales y violentos.

Generalmente el término populismo tiene un sentido peyorativo, aunque para el ciudadano común suena, en principio, maravilloso, ya que hace referencia a las medidas políticas que lo favorecen, aunque, en realidad, los populistas no buscan el bienestar o el progreso de un país, sino que se trata de conseguir la aceptación de los votantes para ser elegidos, sin importar las consecuencias y, por supuesto, el cumplimiento de las promesas.

Por ejemplo, del lado de la izquierda suelen ocurrir fenómenos como ofrecer subir el salario mínimo en cualquier momento, sin consultar las verdaderas posibilidades y las realidades económicas del país y sus empresas, esta una decisión propia del populismo, que tiene consecuencias nefastas posteriormente desde el punto de vista económico y especialmente en fenómenos inflacionarios. El populismo de izquierda puede ahuyentar las inversiones extranjeras por un supuesto nacionalismo que expropiará o nacionalizará empresas o inversiones extranjeras, lo cual, finalmente, sume a la población en más pobreza por falta de oportunidades o de la ausencia de competitividad del país.  

En la otra orilla, los populismos de derecha, frecuentemente con talante autoritario y despótico, suelen asumir posiciones guerreristas, de limitación de libertades a ciertos grupos de ciudadanos, persecución a sus opositores o favorecimiento de grupos económicos de su interés, en menoscabo de poblaciones menos pudientes, todo esto mencionando sólo algunos ejemplos.

Por supuesto, en cada país suceden cosas diferentes cuando atraviesan fenómenos de candidatos o gobernantes populistas, y en ocasiones son graves y extremos, como sería el caso de afectar las libertades políticas y someter a prisión las corrientes de opinión opositoras.

En algunos casos se habla de candidatos populares, en contrario sentido de populistas, cuando significa que son reconocidos y muy aceptados por la ciudadanía, se trata de propuestas o líderes que buscan construir el poder a partir de la efectiva participación de las grandes mayorías de la población, por lo cual son muy bien reputados.

Se sabe que los populistas no conforman un conjunto homogéneo, sino que muestran ciertas diferencias notables en cuestiones políticas y económicas. Por otro lado, tienen muchos puntos en común que los oponen a quienes no participan de su ideología, la cual se basa principalmente y más frecuentemente en la distribución del ingreso y la riqueza, con un corte marcadamente socialista.

En los años recientes, no hubo experiencia populista regional que no atravesara serias dificultades de orden económico, político o social o que no terminara en una debacle de tal naturaleza que destruyera la economía, las instituciones, los partidos, los derechos ciudadanos, las leyes y, además, que no se apropiara de la interpretación de la ley a su amaño y conveniencia. Es un hecho verificado que se vuelven verdaderamente arbitrarios en la interpretación a su favor de las Constituciones de los respectivos países.

Los populistas tienen al inicio momentos de gloria y de relativo éxito, utilizando medios como la emisión monetaria para financiar gasto público, abusar del endeudamiento, decretar la ejecución de obras, programas y contratos no viables técnica o financieramente,  sin respaldo económico, lo cual les crea una aureola de “redentores” pero, simultáneamente, echándole el “agua sucia” al sector privado, a los ricos y a los grupos económicos, además, persiguiendo opositores como traidores al país, etc., etc.

La emisión monetaria creará una dependencia del Estado por ese tipo de “recursos”, fáciles y siempre disponibles, hasta convertirse en una alta o desbocada inflación por ser gastos sin producción real que cree dinero y esto, como se ha demostrado toda la vida, en todos los países, terminará socavando el ingreso de los ciudadanos y especialmente de los más pobres que no tienen más alternativa que comprar lo que necesitan para su vida y sustento a precios más altos cada vez. Ver, por citar un ejemplo, la hiperinflación que ha tenido la Venezuela con el populismo de Chaves y Maduro quienes destruyeron el valor de su moneda y de sus reservas, al punto que nadie recibe las distintas denominaciones del Bolívar que han intentado (cuántas veces han quitado ceros y ahora van para moneda digital sin ningún respaldo), el cual tuvo que ser sustituido por el truque o por el uso del dólar como moneda de cambio corriente.

Cabe mencionar que estos procesos populistas suelen tomar unos cuantos años y para corregirse muchos más, dolorosos, tortuosos e inciertos. En el mundo entero, el cuadro final es siempre el mismo: es muy difícil y costoso recuperar un país luego de un período de marcado acento populista en su gobierno. En consecuencia, alejémonos de los “pajaritos de oro y los cantos de sirena” de los populistas de cualquier naturaleza.

domingo, 8 de agosto de 2021

EL PLANETA QUE NOS TOCÓ

 Comentario 09/08/2021

 

EL PLANETA QUE NOS TOCÓ

 

Por: Carlos Alberto Mejía C.
Ingeniero Industrial y Administrativo.
https://reflexiones-de-cam.blogspot.com/

 

En el universo, en el gran cosmos conocido y desconocido, tenemos un lugar de privilegio en nuestro planeta, la tierra, quien parece ser único e irrepetible. Por más que los astrónomos y los científicos de muchas disciplinas busquen sitios en el universo con condiciones de vida como las nuestras, se estrellan con la realidad de que pueden existir unos pocos lugares que se asemejan, pero no se repiten las condiciones de la tierra, en sitios de las galaxias inexplorables para el hombre, por más que sean las más cercanas. La tierra, como es hoy, no tiene equivalente en el universo hasta ahora conocido. Definitivamente, es un lugar singular y sin “mellizos o gemelos” a la vista.

Inclusive, los astrónomos nos advierten que el cosmos es un lugar “violento” en evolución constante, por los infinitos fenómenos de creación y destrucción, en esencia transformación, que se suceden continuamente y que están inmersos en la infinitud del universo. Lo que existe hoy no será lo mismo mañana, miles de años más adelante se habrá transformado. De planetas, estrellas, polvo cósmico, energía, materia oscura, constelaciones y galaxias está formado el universo, que viaja y se desplaza en una infinita danza de cambio y mutación.

El cosmos, el tiempo, aunque para el hombre es finito, para el universo es infinito. Las incontables galaxias que existen podrán expandirse o contraerse, explotar o fusionarse, volverse polvo, gases, energía o masas diversas en contenido y características. Los llamados huecos negros, todavía no caben en la explicación racional del hombre, se sabe que existen y cómo se comportan, pero no se entiende a ciencia cierta su creación y desaparición o su “apetito” voraz por succionar todo lo que esté en su camino.

Contrario a lo que sucede en ese inconmensurable universo, la tierra si es mesurable y finita, y el hombre también. Ahora, si el planeta es finito, nosotros no podemos querer ser ilimitados y de esta manera abusar del planeta y sus propios límites. Posiblemente todo lo que hoy vemos en el cambio climático, es la reacción de la tierra a nuestras contravenciones con ella misma, como hábitat, y no sólo como recurso al que podemos manipular y del que podamos abusar en su existencia, uso y contenido.

Lamentablemente, hasta nuestra cultura humana y nuestras costumbres, frecuentemente con afanes de posesión y de grandeza, nos llevan a abusar de la tierra y de sus recursos, tanto de los seres vivos como de los inanimados. La sobreexplotación de los minerales, los animales y los vegetales o de recursos como el agua, el uso de los pisos térmicos, de los lugares habitables, de los climas y de las estaciones, entre otros, son alterados por la mano y la ciencia humana, lo cual, en esencia, son acciones en contra de la propia naturaleza y del hombre como parte de ella.

Se requiere un pensamiento global y mundial común sobre la finitud del planeta y los suministros que nos proporciona, para preservarlos y no para agotarlos o transformarlos en desechos y contaminación en el agua, el aire, las plantas, los mares y los animales que los habitan.

No pueden ser sólo soluciones locales sino mundiales, no importa donde vivamos, todos los humanos vivimos en la tierra, y es el único lugar en el universo donde, como comunidad y como raza, podremos vivir. Todos los países debemos contribuir para el bienestar de la tierra, so pena de afectar gravemente nuestro propio bienestar. Las ocasiones para acompañar el bienestar de la tierra y su naturaleza, se presentan en el día a día, de todos los días. Cosas tan simples como la separación de los residuos y su correcta disposición o su transformación ya son un gran avance. El cuidado de las especies animales, incluido el finito hombre mismo, y de la producción vegetal que forma parte de nuestra fauna y flora, debe ser una conciencia común, vivida, sentida, interiorizada y practicada en todas las comunidades de todo el mundo.

No podemos sobreexplotar al mundo que nos rodea, es nuestro hábitat, el lugar donde vivimos, han vivido y vivirán las distintas generaciones de seres humanos. ¿Hasta cuándo nuestra tierra será nuestra? O el universo nos la arrebata por sus procesos de transformación en miles de años o nosotros la acabamos desde ahora, y es la única tierra que tenemos.

El planeta azul, la tierra, lleno de color y de variedad de seres y lugares, si lo comprendemos y tratamos como nuestro único e irrepetible hábitat, y no sólo como el lugar donde nos aprovechamos de él para vivir, empezaremos a ser y obrar de manera diferente, con gratitud por tenerlo y con lealtad por cuidarlo. Comprender que es único e irrepetible y que, posiblemente, en ningún otro lugar del universo entero la raza humana podrá vivir, crecer y desarrollarse. Tenemos el deber de ser buenos terrícolas para nosotros mismos y para las generaciones por venir. Debemos pensar y construir una relación diferente con nuestra querida tierra.

ECONOMÍA RESILIENTE Y MAL GOBIERNO

  Comentario 07/07/2025   ECONOMÍA RESILIENTE Y MAL GOBIERNO   Por: Carlos Alberto Mejía C. Ingeniero Industrial y Administrativo. ...